Desde hace un tiempo me propuse trazar un camino hacia adelante (aunque el tiempo estuviese corriendo como un conejo maniático delante mío mucho antes de que yo pudiera darme cuenta), un camino que no sé muy bien a dónde me conducirá. Si iré a donde quise siempre ir o si lamentablemente seguiré el camino impuesto. No sé. "No sé" sigue siendo la respuesta correcta, pero ya, por suerte, sin ese fondo de nada, sin esa incertidumbre pesada que formaba un vacío a mis espaldas sin saber a donde carajos podría llegar a caer. Sigo sin tener la certeza (porque es muy de mi) de no saber a dónde iré a parar hasta que las cosas tomen su propio rumbo, pero por lo menos hay cosas moviendose y yo estoy parada tratando de hacer malabarismos. Porque lo único que me importa es no volver a pisar nada que tenga que ver con mi pasado. Y sin rencores, ojo.
Hoy lei el ultimo post de Rob (el de LA PELICULA, te acordas ♥) y parece que estamos todos igual! Esa maldita perra que muchos conocen como "certeza" se esconde muy bien y nadie sabe dónde está. Nosotros los jóvenes no sabemos y los "adultos" tampoco pero ni se calientan. Igual yo creo que si no le mandaran una V en lugar de la T en certeza, habría muchos menos problemas en el mundo.
ResponderEliminarQué ironía la vida de un veinteañero, tan genial y llena de dilemas a la vez.
(y SABELO, yo también le agregaria muchas más cosas a esa lista, pero la gente se aburriria y ya nadie comentaría mis posts jajaj)